Un dia para relajarse [Priv. Celes]

por **Naminé** Vie Oct 05, 2012 2:02 pm

Estaba ansiosa por estar en un lugar asi, nunca habia ido a unas aguas termales y me ponia nerviosa saber que acabaria dentro de una. Pensaba ir a las aguas de fuera para poder apreciar las estrellas de aquella dulce noche que me envolvia. Me puse mi unico bañador de dos piezas con volantes blanco, agarre una toalla y me dirigi entre el camino de piedras hasta las calidas aguas. ¿Podria relajarme al fin? Ultimamente me preocupaba por todo y no tenia ningun momento de paz.

Me gire para ver si habia alguien y todo parecia completamente solitario por lo que hice aparecer mis alas blancas para poder relajarme aun mas

por **Celestia Rudenberk** Dom Oct 07, 2012 6:57 am

Asuntos y trabajos estaban consumiendo la vida que nunca podré agotar... esa vida inmortal que me habían ofrecido como shinigami. Mi cuerpo pese a haber pasado ya cinco años como shinigami, conservaba aquella esencia humana por lo que por períodos de tiempo se debilitaba y se sentía tan pesado~ Por circunstancias más o menos, había decidido ir a las aguas termales más cercanas para tener un tiempo de descanso, quizás unas pequeñas vacaciones.Como siempre, había organizado todo con anticipación y mis bolsos estaban prontos por lo que no demoré en tomar viaje y llegar tan pronto como fuera posible.

Una vez llegué, dejé mis objetos personales al cuidado de Mii-chan en nuestro tatami, me quité mi atuendo y me envolví en mi toalla, calcé mis sandalias y caminé hasta las termales externas para poder despejar mi vista viendo el basto cielo. Afortunadamente era na noche muy tranquila, y llena de estrellas que alumbraban en la oscuridad acompañadas de la hermosa gran luna que posaba en lo más alto del cielo.

Spoiler:

...Repentinamente, mis ojos alcanzaron a ver una figura femenina que esbozaba sus alas libremente. Mis pasos se quedaron estancados y no pude moverme. Solo observé. La curiosidad me estaba llamando e inevitablemente no pude dejar pasar aquella situación. Me acerqué un poco más y mientras marcaba en mi rostro una sonrisa amable, llame con suavidad a la joven que estaba delante de mi.

- Disculpa la interrupción, pero no pude evitar acercarme. ¿Podría decirme su nombre? ¿Sabía que tiene unas alas muy bonitas?

Quizás ver algo nuevo, algo que no había podido apreciar con anterioridad, la sangre había llegado a mis ojos enrojeciendo aún más el color que ya poseo. No era de fastidio, sino de emoción. Pocas veces y pocas cosas llaman mi atención, pero como antigua humana que había tenido una vida aburrida... observar tal espectáculo era algo realmente impactante.

-¿Podrías decirme qué eres? Y por cierto, mi nombre es Rudenberk Celestia, gusto en conocerla señorita. Incliné educadamente mi cabeza mientras mantenía mi sonrisa marcanda por la comisura de mis labios.

por **Naminé** Mar Oct 09, 2012 2:08 pm

Movi mis alas con un suuspiro de sasifaccion, tan relajante.
Un ruido hizo que los pelos de la nuca se me encresparas por el miedo producido, me gire miedosa para ver unos hermosos ojos color carmin de una linda chica envuelta en una toalla.

En aquel momento me senti una idiota impotente por haber dejado verle mis alas-Gra-gracias- susurre dudosa esquivando la pregunta sobre mi nombre.

La luna ya no tenia merito en comparación con sus ojos, realmente de hipnotizaban con su hermosura, me perdi en ellos durante unos segundos hasta que volvió a hablarme haciendome volver a mi tan odiada realidad

-Yo-yo s-soy- no podia articular mas palabras, simplemente el miedo me habia paralizado dejándome quieta como una estatua, por un momento dude sin en decirselo aunque claro estaba lo que eraa pero aun asi preferia elegir un momento mas adecuado

por **Celestia Rudenberk** Mar Oct 09, 2012 6:19 pm

Cada uno de mis sentidos había percatado cierta regicida en su persona, incomodidad con mi presencia y algo de miedo. Probablemente fuera la causa de su inestabilidad, después de todo no había podido controlar alguna parte de mi ser y había sido llevada por mi impulsiva curiosidad. Inmediatamente entré a la terma y me senté para sentir el agua caliente sobre mi piel... tal calidad me había puesto a meditar por unos minutos acerca de lo que debería decir o hacer para que aquella persona que permanecía a pocos segundos de mi, pudiera estar tranquila. Recosté mi espalda sobre unas rocas que estaban allí y apoyé mi cabeza relajadamente. La noche aún parecía muy agradable; esta noche probablemente podría incluso llegar a olvidar de que era un shinigami para descansar apropiadamente.

Estas no tan brillantes ideas, habían cruzado mi cabeza por lo no quedó más que sincerarme con aquella señorita.

Debo suponer que eres un ángel, y por como te encuentras... quizás debieras no verme a los ojos si eso te incomoda. Parece que mi presencia te perturba. Seré sincera, hoy solo quiero estar en calma, no me veas como el ser macabro que parezco ser... no tengo intención alguna de hacerte daño. Relájate.

Sonreí después de mis palabras mientras le observaba, pero no muchos segundos después volví a posar mi mirada en el cielo... realmente el aire era muy agradable, la brisa que mecía las hojas era increíble y el agua quitaba la tensión de cada uno de mis músculos. Solo el silencio que había en la atmósfera que nos rodeaba, hacían que pudiera estar atenta a cualquiera palabra que aquella persona que se hallaba cerca de mi, pudieran llegar correctamente a mis oídos.

Spoiler:

por **Naminé** Miér Oct 10, 2012 5:45 pm

Me la quuede mirando sin apartar la vista de ella, sus movimientos parecian agiles y bellos. Pero aun estaba nerviosa por loque pudiese pensar de mi al saber lo que yo era. Movi mis alas entre las calidas aguas con algo de pena, aun no me acostumbraba a pensar que era algo que nunca habia pensado que existiria.

-Estaba pensando que tienes unos hermosos ojos, no me incomodo tu presencia y no me pareces ningun ser macabro, es mas te veo como una persona normal- dije con una leve sonrisa mostrando algo de confianza

Me quede observandola con curiosidad, realmente me parecia hermosa y me trasmitia confianza y bien estar

por **Celestia Rudenberk** Jue Oct 11, 2012 7:26 am

Sus palabras finalmente había llegado a mis oídos, el ajetreo de sus alas en el agua complementaban aquella atmósfera tan natural.

Me complace oír eso. Sabiéndolo podré estarme aún más tranquila. Gracias por su respuesta, y gracias por sus palabras y los cumplidos que éstas dan a mis ojos.

Solo permanecí en la misma posición en la que me hallaba hacía algún rato, hasta notar algo~

Sabes, pienso que eres muy agradable. Podría invitarte una taza de té un día de estos, si así lo deseara.

Luego de haber terminado mi frase, carga con mis manos un poco de agua y la dejé correr por mis hombros con suma delicadeza.

Spoiler:

por **Naminé** Jue Oct 11, 2012 9:00 pm

Sonrei suavemente confiando cada vez mas en ella, no habia salido corriendo por lo que era una buena señal- Gracias, me encantaria tomar el te contigo- dije tranquila mientras me sumergia un poco mas entre el agua mientras cerraba los ojos con tranquilidad

-Naminé...- dije en un pequeño susurro- Me llamo Naminé y soy un ángel que aun no comprende bien su destino- ¿Por que no contarselo? Parecia alguien de fiar, ademas empezaba a respetarla y no me gustaba tener secretos para la gente y mucho menos despues de que vieran mis alas.

Me roce con la llema de los dedos una de ellas, eran suaves y calidas y algo mas blancas que unas semanas atras, segun habia leido tu comportamiento se reflejaba en su color. Si eras buena persona se volvia cada vez mas blanca pero si era alguien malo se tornaban grises

por **Celestia Rudenberk** Vie Oct 12, 2012 3:06 am

¿Destino? Pregunté de forma curiosa y con algo de gracia en mis labios. No conocía información alguna sobre los ángeles, su tiempo estimado de vida o similar, por lo que me animé a preguntar acerca de ello.

¿Cuánto tiempo vive un ángel? o, ¿quizás son inmortales? ¿Les temen a algo en especial? Sonreí con franqueza en espera de una respuesta contundente ya que cualquier información que pudiera recolectar de cada una de las especies... me ayudaría a comprender mejor mi situación. Era todo lo que podría hacer o decir, ya estaba comenzando a hacerse muy tarde y Mii-chan aún estaba esperándome en nuestro tatami.

por **Naminé** Dom Oct 14, 2012 2:36 pm

-Mi designio, la razon por la que los angeles estan en la tirra, su mision- conteste a su primera pregunta pensando en todos los libros que habia leido que hablaban sobre aquella mision, yo tenia que reunir las piezas de mi puzle pero aun estaba sin empezar.

-En realidad apenas se sobre mi especie, llevo unas semanas sabiendo que no era una humana y supongo que le temo a muchas cosas, sigo teniendo mis debilidades- volvi a contestar tapandome un poco con mis alas como avergonzada por nunca suponer lo que realmente era pero tenia que asimilarlo.

por **Celestia Rudenberk** Lun Oct 15, 2012 12:45 am

Ya veo, no sabes mucho acerca de ello. Si desconoces algunas cosas, debes tener más cuidado cuando y donde las enseñes. Señalé con mis dedos índice y anular sus hermosas alas. El lado oculto de esta gran ciudad que yo conozco es apenas la mitad de lo todo lo que me queda por conocer, pero de lo que he aprendido... cosas tan preciosas y preciadas como un par de alas de un ángel, son cosas por las que brujas y otras criaturas podrían llegar a matarte o hacerte daño. Debes tener más cuidado, no creo que quieras teñirlas de negro. Mi sonrisa podría haberse visto un tanto sádica pero no fue por aquello que mi boca habría dicho sino por cada uno de mis pensamientos. Un shinigami es el poseedor de unas alas negras, más negras que el de un ángel caído. Alas cubiertas en sangre y tan invisibles a los ojos comunes que solo otros shinigamis serían capaces de ver. De esta forma, seres como nosotros eramos capaces de proteger nuestra propia información y ubicación.

No quiero saber tus debilidades pero ahora sé que eres una recién llegada... si necesitas ayuda, puedes llamarme. Mientras pueda ayudarte, estaré para ello. Inmediatamente quedé en silencio tras un suspiro mientras me levantaba de aquellas aguas para regresar al vestuario. Tomé la toalla y me envolví en ella.

por **Naminé** Lun Oct 15, 2012 3:49 pm

Me quede mirandola con espectacion, realmente era demasiado inocente como para darme cuenta de eso, pero ella parecia mas inteligente y saber mucho mas sobre ese tema que yo por lo que decidí quedarme un poco mas con ella, no parecia una mala persona y la empezaba a ver como una "maestra" por asi decirlo.

-Mis alas cubirtas del color negro... ¿Que es un ángel caido?- pregunté recordando a los angeles de alas negras, no sabia casi nada sobre ellos por lo que el tema me parecia interesante y mi curiosidad crecia segun estaba con ella, la segui liandome la toalla al cuerpo al igual que ella.

-¿Te molesta si estoy contigo? No conozco a nadie aqui- hice desaparecer a mis alas con un pequeño brillo quedando asi la marca en mi espalda de que realmente tenia alas, la cicatriz de poseerlas

por **Celestia Rudenberk** Lun Oct 15, 2012 6:07 pm

Mi sonrisa ladina y mi vista ligeramente desviada para observarla hicieron que mi cuerpo se detuviera por un momento para esperarla. Realmente era un ser bastante inocente.

- Claro, no me molesta que vengas. Después de todo ya te he invitado.

Una vez ella estaba pronta comencé a caminar hacia mi tatami sin prisa alguna mientras le platicaba en voz muy suave cosas sin demasiado detalle.

- Sí, así como lo has escuchado... alas teñidas de negro. Eso indicaría que has caído como ángel, y tu misión ha fallado. Parte de tu alma se ha teñido de maldad y cierto egoísmo haciendo que pierdas total pureza. Un ángel caído sería un ángel que ha "pecado" por decirlo de alguna manera. Un ejemplo sería... mmh... Hice una pequeña pausa para ordenar mis pensamientos y retomé la conversación. Supongamos que yo soy una bruja y tu me sigues con el fin de que puedas aprender algo de todo lo que digo... pero yo poco a poco te comienzo a enseñar hechicería, maleficios y comienzas a entusiasmarte con esa idea de crear nuevas cosas a cambio de otras. Esas nuevas cosas pueden ir a tu favor, pero a cambio perderás toda tu inocencia, el bonito color de tus alas, la sonrisa, la sinceridad... cosas como esas. ¿Entiendes?, eso haría de ti un ángel caído, un ángel con alas teñidas.

Seguí caminando hasta toparme con la puerta de la habitación, descalcé mis sandalias y entré dejándole la toalla a Mi-chan mientras tomaba mis prendas y comenzaba a vestirme. Ya habían traído el té a la habitación y Mi-chan especialmente había servido ya en las tazas.

por **Naminé** Mar Oct 16, 2012 2:12 pm

Sonrei tirnamente, realmente su palida piel brillaba a la luz de la luna haciendo resaltar sus hermosas y delicadas facciones, sus ojos rojos reflejaban bastante sabiduria haciendome saber que sabia muchas cosas desconocidas por mi.

-Es un placer poder estar contigo-Sonrei al saber que podria estar mas con ella, queria conocerla y aprender de ella ya que parecia madura mientras yo simplemente era una niña demasiado inocente e inmadura.

-No desearia tener mis alas teñidas del color de carbon, estare mas atenta. Gracias por tu consejo- dije cuando un maullido me sobresalto, aturdida me di la vuelta para ver un pequeño gatito. Me di cuenta de que estaba sangrando por lo que me hacerque a el para saber a que me enfrentaba, al parecer tenia una piedra clavada en el costado. Se la extraje con sumo cuidado para curarle con mis poderes, maullo debilmente mientras se quedaba dormido a mi lado

por **Celestia Rudenberk** Mar Oct 16, 2012 6:35 pm

- No es nada... descuida. Dije con tono neutral en mi voz.

Le alcancé una bata y la taza de té para que no se enfriara su cuerpo y me senté a beber mi té mientras observaba silenciosamente como ella interactuaba con Mii-chan. Parecía que Mii-chan estaba actuando con cuidado, al parecer estaba en sus días débiles. Luego de que todos vayan a dormir, lo llevaré a las aguas calientes del lugar para calmarlo y aliviar su tensión, probablemente de esa forma podríamos "hablar" mejor y saber qué sucede.

Spoiler:

. . .

- Su nombre es Mistler. No era necesario que desperdiciaras tu energía curando su herida, suele sanar tan rápido como el chasquido de dos dedos Señorita Namine.

Verla sin aquellas enormes y bellas alas a ambos lados de su cuerpo hacia que pareciera una persona más aunque su delicada figura veía que si recibiera un solo golpe podría quebrarse. Su largo cabello rubio despedía pequeños destellos de luz. Su mirada era completamente cálida.

Mi silencio siguió persistiendo, solo esperaría a escuchar cualquier pregunta que ella deseara decir. Me gustaba estar en calma y solo hablar lo justo posible.

por **Naminé** Miér Oct 17, 2012 7:14 pm

-Al contrario, la vida y la muerte estan muy cerca, cuando puedes impedir algo malo es mejor hacerlo. Me gusta ayudar y por mi misma no puedo dejar a alguien lastimado por muy rapido que se cure- conteste con tranquilidad con una suave sonrisa de felicidad.

De nuevo otro maullido y un nuevo gato, que corrio a esconderse entre mis piernas. Seguida por el llego una mujer enfadada con una escoba en la mano que empezo a golpear al gato bruscamente- ¡Te dije que no molestaras mas a los huespedes!- decia la mujer mientars segui dañandolo, por inercia agarre su arma impidiendo asi moverla.-Yo me encargare de el, puede irse- estaba malhumorada pero asintio y se fue, me agache para ver al gato asustada. Era de una tonalidad gris con la piel tan suave como el terciopelo y unos ojos completamente azules- ¿Tienes dueño?

por **Celestia Rudenberk** Jue Oct 18, 2012 8:27 am

No había nada que pudiera hacerse, después de todo era un ángel por lo que debí involucrarme y acercarme hasta donde estaba la pequeña joven y cargué entre mis brazos a Mii-chan. Parecía que ella aún no lo había notado, y ante sus palabras tampoco había parecido entender lo que quise decirle. No me quedó más que susurrarle el motivo de lo que había dicho con anterioridad.

- Señorita Namine... Mystler (Mii-chan) es un Shinigami, no puede morir... el ya murió una vez hace algún tiempo, cuando solía ser tan humano como las personas de este lugar.

Inmediatamente después del susurro, di un paso atrás y regresé a mi lugar. Me senté y observé a Mii-chan, su mirada parecía algo desconcertada, y algo malhumorada. Probablemente Mii-chan no quería que dijera esas palabras, pues podrían tener un mal resultado. Por lo que me senté de espaldas a la joven y susurré al oído de Mystler mi motivo.

-Mystler, tu estás bajo mi cuidado y siempre lo has estado. Si sales herido en todo esto, yo debo hacerme cargo de ello para retribuir lo que has hecho por mi. En cuanto a esa joven, no lo dije para alterarla, tampoco para ocasionarle algún miedo ni mucho menos para delatar nuestra posición... solo que ella y nosotros somos diferentes. Si ella es la luz, nosotros la oscuridad, debemos mantener esa delgada línea. Ayudarla a que entienda su situación estaría bien, hacer uso de sus poderes o ella el de nosotros... es algo que debe mantenerse bajo control.

Luego de decirle aquellas palabras a mi compañero, regresé a mi posición pero noté que había entre sus piernas un felino bastante malherido... En mi posición no podría hacer nada, más que solo observar; y no fue más hasta que enseguida de ver el triste rostro de aquella joven que estaba sentada frente a mi, que me tomé el atrevimiento de hacerle una pregunta.

- ¿Te gustaría cuidar de él? Señalé al gato que tenía entre sus piernas mientras esperaba pacientemente su respuesta.

por **Naminé** Vie Oct 19, 2012 5:51 am

Me quede mirando a su compañero con curiosidad, alguien ya muerto, un ¿Humano? combertido en un gato

-¿Y tiene su mini guadaña?-pregunte imaginandome de una forma adorable- No me importa cuan muerto este, ya que ahora esta aqui ¿No es asi? Cuando alguien incluso despues de la muerte puede moverse es que aun le queda una pizca de vida en su interior aunque sea muy pequeña y se niegue a aceptarlo.

Me quede mirando como la chica se daba la vuelta dandome la espalda y hablando con su pequeño shinigami, no me importo mucho ya que estaba algo acostumbrada-¿Tu tambien eres un shinigami, Celes?-dije en un susurro casi inaudible

Pose una mano en el gato de mis piernas, sentandome para apreciarlo mejor- Supongo, mientras el lo desee- sonrei con ternura mientras el me lamia la mano ¿Me habria entendido?

por **Celestia Rudenberk** Vie Oct 19, 2012 5:00 pm

Había escuchado su primer pregunta... ¿una mini guadaña? Mystler no era capaz de llevar tal cosa porque era mi compañero y mi guía, quien debía hacer ese tipo de "trabajos" por culpa de mi descuido, era yo. Mystler solo estaba ahí para no estar sola, desde que solía ser humano, siempre había estado conmigo y era "natural" que lo siguiéramos estando aún después de nuestra muerte. Pero justo al darme la vuelta, y terminando de hablarle a Mii-chan, ella deja caer de sus labios otra pregunta bastante curiosa lo que me motivó a responderle tan pronto como terminé de regresé sentarme frente a ella.

- Si, también soy uno. Creí que ya lo habías notado por el color que cargan mis ojos.

No pude sonreír al decir aquellas palabras, tampoco mostrar un lado cálido, ser uno no era algo de lo cual pudiera correr una brisa armónica y confortante...

...

Habiendo escuchado sus palabras de querer tener a aquel pequeño felino como mascota, incentivó a motivar mi "plan". Me puse de pie, sacudí mis prendas y corrí una de las puertas del tatami para dirigirme a donde se encontraba la encargada del lugar.

- Si, lo quieres... ese gato ya es tuyo. Piensa un nombre para el mientras regreso. Y... ponte cómoda como si estuvieras en tu propia habitación. Mii-chan irá conmigo, no me tardo. Dije mientras aún me hallaba parada en la puerta.

por **Naminé** Sáb Oct 20, 2012 10:51 am

Me quede pensandolo, sus ojos no me parecian extraños; quizas era yo la que se estaba acostumbrando a lo extraño y lo que no era natural, mire al gato con tristeza sintiendo un fuerte impulso por curarlo mas acababa de aprender que debes ser tu el que se cure o tu mismo querras que otros te curen impidiendo a tu cuerpo ser fuerte.

Mire como se iba la chica de ojos carmesies acompañada por su gato, ¿Un nombre? en realidad no tenia ninguno en mente. No era demasiada buena para los nombre, me quede mirando su mancha blanca con curiosidad sin despertarlo de su pequeña siesta. Di un suspiro y me quede mirando la luna que seguia preciosa como siempre...

Entonces me vino la idea a la cabeza, sonrei dulcemente mientras le acariciaba la cabeza suavemente- Ya se cual sera tu nombre- susurre con felicidad por poder tener a un nuevo amigo

por **Celestia Rudenberk** Dom Oct 21, 2012 7:10 am

Fui hasta lo de la encargada como había quedado mientras manteníamos juntos a Mystler una especie de conversación telepática que generaba mutuamente confort y bienestar. Nuestros lazos se habían vuelto a fortalecer nuevamente.

Una vez la ubicamos, hablé con ella acerca del gato. Ella al principio se negó a dármelo pero tras mi insistencia y mi aura algo negativa que comenzaba a acumularse a mi alrededor, termino por aceptar. El problema había quedado resulto confomemente y regresamos a nuestra habitación.

Allí seguía ella, en la misma posición a como se había quedado antes de que nosotros partiéramos.

- ¿Ya le has encontrado un nombre? El gato ya es tuyo. La casera no se negó y de seguro contigo tendrá una mejor vida.

Se desprendieron junto con mi cuerpo, mis piernas dejándome caer sentada en mi almohadón, tomé la taza de té y di mi último sorbo. Mystler se sentó a mi lado y observó la situación atentamente.

por **Naminé** Dom Oct 21, 2012 3:50 pm

Sonrei suavemente a la joven de ojos carmesíes, quizás el nombre no fuera muy original pero me parecía que era el que mejor le iba al gatito que se encontraba en mi regazo descansando- ¿No ha habido problemas?-dije en un tono un poco serio- Me alegro de poder encargarme de el, deseaba tener a un amigo a mi cuidado- sonrei a su pregunta-¿Ves esta mancha en su frente?- dije tocándola suavemente- He pensado en la luna ya que su pelaje es como la noche con una luna en ella. Por eso he decidido llamarle Luna.

Me quede observándolo en silencio, rozándolo con la yema de los dedos, di un pequeño sorbo al te para continuar mirándolo, analizandole las heridas que tenia y si alguna necesitaba ser curada por mi.- ¿Y que se supone que haceis los sihigamis?- pregunte con curiosidad ya que nunca antes habia echo aquella pregunta, sabia lo de la guadaña pero no sabia que es lo que hacian y tener a una delante me hacia tener curiosidad

por **Celestia Rudenberk** Dom Oct 21, 2012 11:38 pm

Me parece un nombre apropiado. Respondiendo ante su comentario, después de todo si ella había asociado tal nombre a la apariencia del mismo, eso le daba un significado especial.

Nosotros contemplamos la muerte misma y cuando esta se lleva a cargo, debemos tomar las almas y conducirla al lugar correspondiente. Muchos de nosotros se alimentan de ellas como uno de los castigos pero solo shinigamis muy enfocados en si mismos y nada neutrales hacen tal cosa. Muchas veces tenemos el deber y obligación de matar a algunas personas, seres o entes pero debe ser una orden superior o tener una muy buena causa para ello. Podemos oler la muerte a cientos de pasos incluso kilómetros, percibirla incluso anticiparla. Esas fueron todas mis palabras, mi única explicación, no podía decir más ni debía. Mis pensamientos se veían interrumpidos, yacía congelada viendo a través de la ventana. La luna comenzaba a teñirse de un color rojizo, parecía que algo pronto ocurriría.

por **Naminé** Mar Oct 23, 2012 2:18 pm

-Supongo que no soy muy original- rei suavemente mientras mis mejillas se tornaban de rosa, mire al gato para dejarlo en mi almohada para ponerme de pie- Entonces un shinigami puede que se comiera el alma mi tia- resople con impotencia por no poder hacer nada- Pero supongo que sin la muerte, la vida seria un completo caos- conteste con una voz serena y tranquila cuando me quede mirando a mi acompañante con extrañeza

Ella miraba la luna fijamente y como un autoreflejo mire el punto que ella contemplaba, una luna del color de la sangre se ejercia imponente entre el cielo oscuro de la noche ¿Que estaba ocurriendo?

por **Celestia Rudenberk** Mar Oct 23, 2012 5:05 pm

Si, los shinigamis son el otro lado de la balanza. Así debería ser al menos. Respondí a su comentario una vez más mientras el clima comenzaba a cambiar, el aire se volvía más pesado e inquietante. Mystler se acercó a la puerta y me observó. Con ello mi rostro cambió, me había asentado más seria y comenzaba a vestir mi cuerpo con prendas oscuras como solía llevar. Esta vez un amplio vestido corto que terminaba en una puntilla blanca, un par de medias bucaneras también con puntilla blanca y unos zapatos con una pequeña plataforma. Arriba una chaqueta negra con algunos vuelos en las mangas, una corbata para completar mi "formalidad" y la formalidad de mi trabajo... pero antes de partir, debía poner mi tiara/cinta sobre mi cabello donde debían prender un cascabel a cada lado. Parecía que la hora de trabajar y actuar había. Mi estancia en las aguas termales había acabado.

Si no tienes a donde ir, momentáneamente puedes ir hasta mi casa, es la mansión que está al final de la calle sur, encima de una colina no muy elevada. Les avisaré a los caseros. Si quieres quedarte aquí o acompañarme, eso lo dejo bajo tu decisión. Mystler quiere que vaya a ver ahí fuera.

por **Naminé** Miér Oct 24, 2012 3:06 pm

Negue con la cabeza- Si esta pasando algo raro, no pienso dejarte sola. No soy tan debil como aparento- conteste con seriedad mirando a la luna teñida de rojo, me acerque al gato y lo cogi en brazos. Si ocurria algo malo no podria dejarlo solo e indefenso, simplemente no podria permitirme ese lujo. Me dirigi a mi bolsa de la ropa y empece a cambiarme poniendome mi vestido corto blanco como la nieve junto con mis sandalias y un pequeño jerseis de un rosa palido sobre el. En mis pies unas botas de igual color que el jersei y un pequeño lazo blanco en el pelo, era todo lo que habia llevado.- Si vamos a hacer algo, mejor sea rapido

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